Seguramente habrán oído hablar en los últimos días del Código LEI o incluso su propia entidad financiera os lo habrá solicitado. En un pequeño resumen, vamos a analizar porqué surge, qué es y quién tiene la obligación de tenerlo.
Su implantación viene motivada por las dificultades que existieron durante la crisis de Lehman Brothers;el G20 puso en marcha el proyecto normativa LEI con el fin de dotar a los mercados financieros de una mayor transparencia. El objetivo es mejorar la evaluación y gestión del riesgo sistémico, al ofrecer una visión más precisa y completa de los riesgos asumidos por cada participante.
El Código LEI es un código global y único, que se utiliza para identificar a las personas jurídicas que son parte en las transacciones financieras y para cumplir con los requisitos de información en los mercados financieros.
Su utilidad es identificar a las partes contratantes en las transacciones financieras en todo el mundo y hacer más fácil para los reguladores los posibles riesgos sistémicos en las primeras fases. El objetivo final es mejorar la gestión de los riesgos financieros.
El formato del estándar internacional LEI está basado en las especificaciones proporcionadas por la norma ISO 17442 que consta de 20 caracteres alfanuméricos. La emisión de estos certificados, es competencia del Registro Mercantil.
En cuanto a los plazos, obtener el código LEI puede tardar aproximadamente 15 días, ya que, una vez presentada la documentación y realizado el pago de las tasas, el Registrador Mercantil debe verificar los datos, comprobar que no existe ya un código LEI y que no haya más solicitudes en curso para la misma entidad.
Una vez que el código LEI es asignado a la entidad, se enviará el certificado LEI a la dirección de correo electrónico de la persona de contacto indicada en la solicitud, quedando desde ese momento activado el código.
La validez que tiene el código LEI es de un año a partir de la fecha de emisión o de la fecha de la última renovación. Dos meses antes de su caducidad, la empresa, en la dirección de correo electrónico facilitada en la solicitud, recibirá un email para que proceda a realizar su renovación.
En relación al coste oficial que la empresa tendrá que asumir para la obtención del código, este es:
• Emisión inicial: 100 euros + IVA
• Renovación anual: 50 euros + IVA
Después de haber repasado tanto el origen del código, como su función y coste, es importante mencionar quienes son obligados a tenerlo y desde cuándo.
Desde el pasado 1 de noviembre, tienen obligación de tener este código las empresas que operen con derivados y con seguros de cambio. Y a partir del 3 de enero de 2018, será obligatorio para las que operen con productos de renta variable y renta fija, como acciones.
Actualmente las personas físicas no se les puede asignar un código LEI.
En blázquezAsociados asesoramos a empresas y particulares en cuestiones económicas y jurídicas desde una cultura de servicios marcada por los valores de compromiso y cercanía.
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